Volviendo a la historia temprana de la humanidad a la sociedad moderna, la cerámica y el vidrio son ampliamente utilizados en la producción y la vida.
El vidrio es un sólido amorfo no cristalino, a menudo transparente, que tiene un uso práctico, tecnológico y decorativo generalizado en, por ejemplo, paneles de ventana, vajillas y ópticas.
El material cerámico es un material de óxido, nitruro o carburo inorgánico, no metálico, a menudo cristalino. Las características mecánicas y físicas de los materiales cerámicos pueden manipularse, entre otras cosas, mediante el ajuste selectivo de la microestructura.
A día de hoy, la cerámica ha demostrado su valía en multitud de aplicaciones. La industria automotriz los usa, por ejemplo, como aisladores de bujía, recubrimientos de balancín, revestimientos de puerto en el área caliente del colector de escape y válvulas livianas en el motor. Sus propiedades eléctricamente aislantes, magnéticas, dieléctricas, semiconductoras y superconductoras se utilizan para la producción de cerámica funcional en la industria eléctrica.